Me he puesto bien pronto el despertador, es fin de semana y quiero viajar.
Las 8:00, demasiado pronto para el tute que llevo... Así que le doy una hora más al despertador.
Había quedado con Alvarito días antes, que el organizaría dónde ir este finde. Durante todo el jueves no da señales de vida; así que rezo a Nuestra Señora de los Ángeles para que descuelgue el celular.
-¡Álvaro, mariconazo, ¿Dónde te metiste, mae?-
El muy playo me dice que no se viene a ningún lado. Medio aturdida por la goma, por el sueño y por su respuesta; me preparo la mochila: manga larga y bikini, que acá nunca se sabe.
Mientras pienso qué hacer o dónde ir, recuerdo las palabras que me dijo ayer mi compa Tapón: Mae, véngase a Cañas, mi pueblo... Le llamo, estaba claro. El mae me dice que soy bien recibida en su casa; me explica que tengo que ir a San José, de ahí coger un taxi a la otra estación y luego el bus para Cañas. Así que eso hago.
Nada más sentarme en el bus de Cañas pienso en la buena siesta que me voy a pegar (son unas 4 horas, así que: rico, rico, papi!).
Pero nada, no hay manera; cada vez que cierro los ojos pienso en el paisaje que me estoy perdiendo; así que no los cierro durante todo el camino.
Cuando bajo de aquel autobús, está mi amigo Tapón (Marcos Vinicio) esperándome con el carro de su tata (*Apunte: no piensen que tata es hermana, sino que es padre; no vean el lio que me hice yo hasta que lo entendí).
Me da una vuelta por Cañas, es pequeño y me encanta la vara. Esa vara me cuadra (Traducción: esa movida me mola). No sé porque, pero me acuerdo de Benigànim, mi pueblo adoptivo.
Me lleva por el río y me explica qué bien lo pasan en verano (ahora aquí es invierno) bañándose y tomando guaro.
Ahora no te puedes bañar, porque hay muchas lluvias y es un poco peligroso tanta cantidad de agua.
Alcañiz: : Al-Qannis, que significa "las cañas o cañizos".
Cañas: por la cantidad de caña brava en los márgenes del Río Cañas.
Curioso.
El paisaje es verde, muy verde; y el clima muy caliente y húmedo; por eso la casa de Tapón está equipada con abanicos (*Apunte: un abanico es un ventilador) en todas las habitaciones y aire acondicionado.
Pasamos a buscar a los amigos de Tapón con el carro de su tata: Pepe y Tito. Yo quiero ir a casa a por una chaqueta, porque siempre refresca por la noche. O eso es lo que pensaba yo, ya que en Cartago es así.
Tapón me mira raro y me trata de loca, así que menos mal que me dejo la chaqueta en casa, porque vieran qué caloooor!!
Nos vamos a un parque donde me presentan al resto de los amigos. De ahí compramos ron y coca, pero como empieza a llover decidimos hacer el botellón en el Superstar.
El Superstar. Madre mia, la Taberneta es elegante a su lado. Ahí fue cuando entendí realmente el significado de la palabra Chinchorro. Un chinchorro es un garito, un antro, un.... un zarrio de bar, vaya.
Tapón y sus colegas entran con las bolsas del botellón, las dejan encima de una mesa y se meten detrás de la barra. Mientras unos cambian la música, los demás saludan a las dos camareras; una viejecica sentada en su taburete que hace más bien poco, y una moza gorda, con el pelo por lavar y las tetas apunto de salirse de la camiseta de licra que marcaba todos y cada uno de los michelines que tenía. Fea con avaricia. Eso sí, muy buena nota, muy teja (*Apunte: teja es maja).
La gente de Guanacaste (esa es la provincia) bebe como si se fuera a acabar el mundo; nunca había visto tal cosa; meterse el guaro entre pecho y espalda con una facilidad digna de admirar. Y luego son capaces de andar y toda la vara.
En el SuperStar, no hacen más que poner Heroes del Silencio; y es que aquí los Heroes son los Dioses.
A parte de las camareras y yo, sólo hay una chica más de entre todos los ticos: Maríaflaca. La borrachina del pueblo.
En una de esas, su novio el borrachín, la coge en volandas y está apunto de darse en la cabeza con el abanico, vaya escena, mae...
Luego nos vamos a casa de la abuela de Tito, no sin antes pasar por unos chinos a comprar Imperiales y arroz; que Tapón tiene hambre.
Estamos ahí un rato y nos vamos al río a acabar el guaro que quedaba.
De ahí derechitos a casa y a dormir como críos pequeños.
Por cierto, FELIZ DÍA DEL NIÑO!!!!!!! ( Y es que acá, todo lo celebran...)